Si bien nuestros perros adultos (más de 2 años) ya han superado la etapa destructiva de la infancia, son perros de rescate con historias únicas. No todos son tranquilos, pero todos tienen una personalidad completamente formada y una capacidad inmensa de adaptación.
Adoptar un adulto es dar una segunda oportunidad a un perro que ya sabe lo que es pasar frío. Te prometemos que el esfuerzo se convertirá en años de afecto incondicional.